Codehciu registró un total de 5 víctimas de desapariciones en el Arco Minero del Orinoco en el monitoreo de medios de comunicación regionales del año 2023.

Prensa CODEHCIU

No se puede negar que las desapariciones en el Arco Minero del Orinoco son constantes a pesar de la falta de información de las autoridades venezolanas competentes y la difusión de estas noticias en la prensa. Aunque la Comisión para los Derechos Humanos y la Ciudadanía (Codehciu) realiza un monitoreo de medios de comunicación al respecto, de manera mensual, se presume que las cifras no reflejan la realidad del contexto minero.

Codehciu registró entre enero y abril del 2023 un total de 5 víctimas de desapariciones forzadas. De los casos reportados, 3 son de hombres y 2 de mujeres. En un informe del Consejo de Derechos Humanos de las Naciones Unidas (2022) se determinó que “los roles y estereotipos de género afectan a muchos aspectos de la vida en las minas, como el tipo de trabajo que ejercen las personas, las condiciones de vida y los tipos de violencia ejercida contra hombres o mujeres”.

De acuerdo a la información obtenida de la prensa, 2 de las desapariciones se ejecutaron en el municipio Sifontes, los otros 2 casos en el municipio Roscio y el restante en el Callao. Asimismo, la desaparición en tres de los casos se generó en contexto de trabajo minero y en los dos casos restantes no se especificó.

En el mes de enero se reportó la desaparición de Lennis Coromoto Salazar de 39 años de edad y oriunda de Sucre; en febrero se registró el caso de una pareja de lancheros, procedentes de El Callao, de las cuales sus identidades no fueron especificadas; en marzo no hubo reportes y en el mes de abril se contabilizaron las desapariciones de Alexis González, pero se desconoce su procedencia; y Orlando Rafael Pérez, oriundo de Caracas.

En la Declaración sobre la Protección de todas las personas contra las Desapariciones Forzadas de la Oficina del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos, reconoce que “todo acto de desaparición forzada constituye una violación de las normas del derecho internacional que garantizan a todo ser humano, entre otras cosas, el derecho al reconocimiento de su personalidad jurídica, el derecho a la libertad y a la seguridad personales y el derecho a no ser sometido a tortura ni a otras penas o tratos crueles, inhumanos o degradantes. Viola, además, el derecho a la vida, o lo pone gravemente en peligro.”

El Observatorio Venezolano de Violencia en su informe anual determinó que en el año 2022 se registró un total de 1.370 casos de denuncias por desapariciones en el país, de las cuales hay una “sospecha importante de muerte”.

Codehciu hace un llamado de atención al gobierno a venezolano para que ponga en marcha investigaciones objetivas y parciales de los casos de desaparecidos en el Arco Minero del Orinoco; para que sancione a los militares y funcionarios que son responsables o cómplices de la violación de derechos humanos; y por último, que garantice el acceso a la justicia y a la reparación de las víctimas y sus familiares.

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